Al final del embarazo hemos de preparar la musculatura del suelo pélvico para el momento del parto, y lo haremos mediante un masaje de nuestro periné, a nivel interno, para relajar la musculatura, y así elastificarla y tonificarla, lo que nos ayudará a evitar una posible episiotomía (corte que se realiza en nuestra musculatura perineal en el momento del parto) y grandes desgarros.
Es un masaje superficial y profundo, que se empieza a realizar a partir de la semana 32 de embarazo, usamos lubricante acuoso para realizarlo, y es un trabajo totalmente manual.
La duración es de unos 10 minutos y se realiza a días alternos, como mínimo 3 veces por semana), aunque si no hay molestias, hacia el final embarazo de la 36 a la 40 semanas, se puede realizar a diario para conseguir un mayor efecto.
Se puede autorrealizarse, es decir hacerlo la propia mamá, si la barriga lo permite, o hacerlo la pareja.
¿Cómo realizamos el masaje perineal?
- Si lo realiza la mamá lo hará tumbada en la cama, sentada en el baño o en la ducha, e introducirá los dos dedos pulgares hasta la falange media, apoyándolos en el músculo y realizando movimiento de arriba (zona superior vagina) hacia el ano, haciendo una pequeña presión y tracción hacia fuera y hacia abajo sobre dicho músculo.
- En caso que lo realice la pareja, la posición más còmoda es con la mamá tumbada y la pareja delante de ella, ésta introduce dedo índice sobre lado derecho, haciendo el mismo movimiento de tracción y presión sobre un lado y después sobre el otro. Una vez la musculatura se vaya relajando y oxigenando vamos a introducir dedo corazón y haremos el mismo movimiento. Con el paso de los días deberíamos conseguir introducir 3/4 dedos dentro vagina.
- Una vez finalizado este movimiento de presión/ tracción de arriba abajo, nos quedamos en la zona entre vagina y ano, con el dedo pulgar externo y el índice interno, se realizan movimientos hacia dentro y hacia fuera, para ir elastificado esta zona que es muy importante en el momento de la expulsión del bebè.
¿Qué debemos tener en cuenta?:
- Higiene máxima a la hora de realizar el masaje, lavarse las manos antes de realizarlo, cortarse bien las uñas.
- La vejiga debe estar vacía.
- Usar lubricante acuoso, o cualquier producto que no altere el PH vaginal.
- El masaje se realizará sin dolor, puede provocar una pequeña molestia o escozor pero nunca dolor.
- Si hay riesgo de placenta previa, o cualquier dificultad hay que hablar con ginecólogo antes de realizarlo.
Es de vital importancia que sea un terapeuta especializado quien enseñe a realizar este masaje.