El lipedema es una enfermedad “desconocida”, ya que hasta Marzo de 2018 la OMS no la considera como tal.
Se trata de una enfermedad crónica que afecta mayoritariamente a mujeres, en la cual se produce un acúmulo de tejido graso, por proliferación excesiva, sobretodo en extremidades inferiores, aunque también en menor medida y en estadios mas avanzados, se presenta en brazos.
Se cree que tiene un origen hormonal, puesto que la afectación se da en mujeres y se desencadena después de algún cambio endocrino, ya sea en la pubertad, después de un embarazo, menopausia, o posterior a tratamiento hormonal por alguna enfermedad.
Este exceso de tejido graso produce mucho dolor y, en muchas ocasiones, incluso incapacidad funcional con falta de movilidad de las extremidades afectadas. Una característica que puede ser un signo evidencial es que, aunque haya afectación de piernas y brazos no se ven afectados ni manos ni pies.
Hay diferentes estadios de la enfermedad según grado de afectación, y los síntomas más comunes son:
- Dolor
- Picor
- Pesadez de extremidades.
- Aparición de hematomas con facilidad.
El tratamiento del lipedema puede ser:
Tratamiento conservador del lipedema:
- Contención mediante medias de tejido plano en estadios avanzados y de tejido circular en caso de estadios mas iniciales.
- Drenaje linfático manual realizado por una fisioterapeuta especializada, para reducir edema, dolor y sensación de pesadez.
- Dieta anti-inflamatoria realizada por una especialista.
- Ejercicio físico adecuado de bajo impacto.
- Apoyo psicológico.
- Lipomesoplastia
Tratamiento quirúrgico del lipedema:
- Técnica WAL (Water jet Assisted Lipossuction), liposucción asistida por agua.
¿Cómo puede ayudar la fisioterapia al lipedema?
- Mediante la realización de drenaje linfático manual, tanto en casos de tratamientos conservadores ya que el drenaje disminuye el dolor, la sensación de pesadez, mejora la movilidad y mejora la circulación, como en casos quirúrgicos:
- Realización de drenaje linfático pre intervención para eliminar posible linfedema que puede ir asociado, y preparar el tejido para la intervención.
- A las 48 horas de la intervención se sacan vendajes, y se realiza drenaje linfático manual. Este tratamiento se seguirá en todo el proceso post-operatorio y en los meses posteriores. Por tanto es de vital importancia la comunicación entre cirujano y fisioterapeuta, para hacer un buen seguimiento de la paciente.
- Mediante vendajes compresivos. A parte de las medias de compresión, cuando sea necesario y para evitar posibles seromas, aplicaremos vendaje compresivo o vendaje neuro-muscular.
- Pauta de ejercicio físico de bajo impacto, en los tempos acordes del post operatorio, tales como natación, andar, ioga, bounce…
Muchas veces las pacientes llegan a un estado de estrés psicológico al llevar años luchando con una enfermedad que no conocen, no estando bien diagnosticadas, desconcertadas entre dietas y ejercicio físico que no suponen una mejora sustancial, y llegando a un estado agravado de Lipedema.